Salud
el atún en lata es malo para el colesterol

2 razones por las que el atún en lata es malo para el colesterol

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El atún es un alimento muy versátil en la cocina y con él se pueden elaborar infinidad de recetas. Al ser un pescado azul tiene numerosas cualidades nutricionales, por ejemplo es una buena fuente de vitaminas y minerales, y es rico en ácidos grasos Omega 3.

Lo más habitual es consumir el atún en lata, pero ¿es igual de sano fresco que el de lata o bien el atún en lata es malo para el colesterol?

Beneficios y contraindicaciones del atún en lata

El atún es un pescado graso, pero la mayor parte de sus grasas son monoinsaturadas y poliinsaturadas. Este tipo de grasas, junto a las del aceite de oliva utilizado normalmente para su conservación, están consideradas saludables. Además, gracias al Omega 3, el atún se convierte en un pescado ideal para controlar enfermedades cardiovasculares y disminuir el colesterol y los triglicéridos. 

Es una fuente muy completa de proteínas que ayudan a reponer la masa muscular, a mantener un buen sistema inmune y al buen desarrollo celular. Además contiene vitaminas del grupo B, A y D. Las vitaminas B estimulan la formación de glóbulos, las vitaminas A favorecen la reparación de tejidos y las vitaminas D, ayudan a absorber el calcio y el fósforo en los huesos.

¿Qué diferencias hay entre el atún fresco y el atún conservado en lata?

Las principales diferencias nutricionales que puedes encontrar entre 100 gramos de atún fresco y 100 gramos de atún en lata son:

  • Referente a las calorías, el atún fresco tiene 119 gramos y el atún en conserva 208 gramos.
  • En cuanto a las grasas, el atún fresco tiene 3,3 gramos y el atún en lata 12,10 gramos.
  • El potasio también es superior en el atún fresco, que tiene 400 mg en comparación con el atún en aceite, que contiene 248 mg. 
  • En relación con las proteínas, su presencia es mayor en el atún en lata debido al aceite usado para su conservación.

Si además, comparamos el atún en aceite con el atún enlatado al natural, que es aquel atún que simplemente está hervido, su gran diferencia reside en el aporte calórico, donde el atún en aceite tiene el doble de calorías que el atún al natural. Igualmente, el atún al natural conserva su presencia de grasas en Omega 3 aunque esté escurrido, en cambio si el atún en aceite se escurre puede perder estas grasas esenciales. Ninguno de estos dos tipos es mejor o peor que otro, sin embargo es mejor tomarlos con moderación y comprobar que el atún en lata que elijas sea bajo en sodio. 

Veamos los dos principales riesgos de consumir en grandes cantidades tanto el atún en lata como fresco.

Alto contenido en metales pesados como el mercurio

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) midió la cantidad de mercurio de diferentes pescados y moluscos, encontrando que los pescados más grandes, como el atún, tenían los niveles de este metal pesado en mayores dosis.

Es por eso que uno de los mayores peligros de comer en exceso atún es su alto contenido en mercurio, tóxico para la salud, pudiendo causar insuficiencia y daño renal permanente. 

Además de ser perjudicial para la salud en general, en el foro internacional realizado por la Asociación Americana del Corazón en 2018, se presentó un estudio que confirmaba que las personas con niveles más altos de mercurio en sangre aumentaban un 23% las posibilidades de acrecentar sus niveles de colesterol LDL, pudiendo tener consecuencias cardiovasculares. 

Es por eso que tanto el atún en lata como el fresco son malos para el colesterol. Y aunque no es necesario eliminarlo completamente de la dieta si su consumo es moderado, la Asociación Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) recomienda añadir en la dieta otros pescados con niveles de mercurio más bajos.

Problemas derivados del proceso de conservación

Debido a su proceso de conservación, el atún enlatado contiene exceso de sal y de aceite, convirtiéndolo en un producto de gran aporte calórico. Este hecho está relacionado con la hipertensión, los problemas digestivos y el aumento de peso.

Si además consumes atún enlatado con otros aceites que no son el aceite de oliva, se aumenta el porcentaje de grasas saturadas que contiene. Abusar de productos con grasas saturadas hace que los niveles de colesterol LDL y el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca aumenten.

Sabiendo esto, si eres una persona que tiene el colesterol alto, acude a un endocrino para poder controlar tus niveles y que te indique si es conveniente el consumo de atún en lata, aunque sea de manera moderada. 

Comer atún en lata de manera moderada no es perjudicial para tu salud, pero siempre te recomendamos que el atún sea fresco para que tus platos sean más saludables, y así evitar las grasas saturadas que hacen que el atún en lata sea malo para el colesterol.

Te aconsejamos consumir este producto solo dos veces a la semana junto a una dieta equilibrada y variada, y apostar por la gran variedad de pescados que hay en el mercado. Valora la posibilidad de sustituir el atún por otro pescado con niveles más bajos de mercurio como pueden ser el salmón, la caballa o el lenguado.

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